6 días donde no aprendí nada
¿Alguna vez te has sentido que una actividad te hace perder el tiempo? ¿Ver televisión quizás? ¿o pasar mucho tiempo viendo nada en el celular?
A mi me pasa.
Me pasó con el hábito de la lectura.
Llegó un momento en que pensé que lo que leía debía tener una lección, debía leer para educarme y saber más. Debía leer algo que me hiciera crecer. Debía leer para luego escribir.
Hasta que me cansé.
Y fue allí donde descubrí que es necesario ese momento de “no hacer nada” y no sentirse mal por eso.
Mientras leía un libro sumamente enriquecedor, revelador y de mucha ayuda, reconocí que me estaba cansando de leer. Por supuesto que no quería dejar el libro a medias, me había costado algo de dinero conseguirlo, pero la lectura estaba siendo más una carga que un placer.
Por supuesto que terminé el libro, pero con una actitud de “¡que ya termine esto por favor!”.
Me tardé 9 semanas en leer ese libro. Y terminé agotado mentalmente. Incluso con temor de tomar el siguiente y que fuera de igual de cansado.
Así que leí una novela de ficción.
Si, un libro de puro y simple entretenimiento.
Al empezar los primeros párrafos me descubrí interesado, alegre y motivado.
Leía hoja tras hoja con entusiasmo. Tomaba cualquier momento para avanzar en la lectura. Quería llegar a un lugar tranquilo para leer. Mientras esperaba en una cita, o iba en sentado en el bus. Mientras desayunaba solo. Me devoré el libro.
¡Lo terminé en 6 días!
6 días en los que le di descanso a mi mente y le permití ser entretenida.
6 días en los que disfruté la emoción de “¡y ahora qué va a pasar!”.
6 días en los que no aprendí nada…aparentemente.
Pero en esos 6 días aprendí que vale la pena disfrutar del entretenimiento. No todo es aprender. No siempre tengo que subrayar una frase. No siempre debo sacar una lección de vida.
Esos 6 días fueron un oasis.
Y como ya sabrás, me gusta escribir. Esos 6 días aprendí técnicas de escritura del autor de la novela. Me emocioné saber que puedo ponerla en práctica.
Así que, después de esos 6 días, estoy listo para mi siguiente libro: Hábitos Atómicos. Puedes seguir mi reto de lectura en Goodreads.
Déjame un comentario si quieres que te recomiende la novela que leí y cuéntame tu cómo oxigenas tu mente de tanto aprender.